VIVENCIAS

UN APELLIDO QUE NO SE ESCRIBE....

Durante mucho tiempo de mi vida tuve la necesidad de un padre, el cual nunca he conocido pero igual alguien a quien respeto, sencillamente por el hecho de ser quien es... mi padre.  Recuerdo que de niña y en la escuela la pregunta de mis maestros era ¿Solo tienes un apellido? ¿Cuál es tu otro apellido? tímida y sonrojada respondía ¡si! solo tengo un apellido, aunque dentro de mi sentía cierto dolor y vergüenza ya que alguien se había encargado de decirme que nombre se le daba a quien no era reconocido por su padre y en esos años de mi niñez vaya que si fue doloroso.

Pero bueno cuento esto no con el fin de quejarme por lo duro de la vida y todo eso, sino para compartir mi vivencia de encontrar lo mas hermoso de todo esto.  Leí recientemente que "Los corazones de las mujeres asombrosamente bellas han sido ensanchandos por el sufrimiento" (Cautivante) asi que soy dichosa!

Es increíble como lo que mas duele puede llevarte a descubrir lo mas hermoso de la vida en mi caso fue la ausencia de mi padre y todo lo que ella trajo consigo, en otros puede que sea la perdida de un ser querido, una relación que dejo tu corazón hecho pedazos, el verte en el espejo y no encontrar la belleza ( la cual te aseguro que si esta) o ver tus sueños en tirados en el suelo, no se en cada vida son situaciones diferentes pero se, que aun cuando las cosas se tornan grises se pueden encontrar grandes tesoros en medio de la adversidad cualquiera que esta sea.

A mi me llevo a dejarme encontrar con lo mas hermoso de mi vida, alguien que me ama tal cual soy, no tengo que ser mas alta, mas baja, mas inteligente, mas ordenada, ¡no! me ama ¡así como soy!, no me pide nada a cambio y por el contrario me ha da todo él.  Alguien en quien puedo estar segura porque su amor es incondicionalmente precioso.  Su amor me alcanzo, y no creo poder vivir sin El.  Sé lo tanto que significamos el uno para el otro, y es DIOS... MI PADRE.

Una noche ya acostaba en mi cama y platicando con El dandole  gracias por su obra en mi vida y darme el privilegio de conocerle; pude sentirlo tan tierno y real en ese instante diciendo;

 - Recuerdas lo que sentias de pequeña, ahora ya no tienes un solo apellido porque YO SOY TU PADRE ahora llevas mi apellido también, un apellido que se tiene pero no se escribe... ahora ERES MI HIJA...

Gracias Papito Dios ser mi Padre (y mi mejor amigo),por dejarme ser tu hija y por darme a un ser maravilloso aquí en la tierra a mi Madre a quien admiro profundamente por su valentía de enfrentar la vida.

VIVENCIA I

Por: Flor de Maria